El uso del histograma o del mismo medidor de exposición de las cámaras ha insinuado una cierta tendencia para hacer prescindible la utilización de un exposímetro de mano. Y quizá lo sea; sin embargo, nunca es tarde para experimentar con este pequeño artefacto y saber encontrar las ventajas que puede proporcionar para una mejora o por qué no, una simplificación en el proceso de exposición. Como siempre, es necesario tomar varias cosas en consideración. Si se estan haciendo tomas para fotografía de deportes, o aún en la fotografía de bodas, es posible que el uso del exposímetro de mano no sea lo más práctico; sin embargo, cuando se llega el momento de hacer fotografía de retrato, cuando se tiene un poco más de control de tiempo y movimiento y decisión de locaciones, puede ser sin lugar a dudas, un aliado para lograr resultados de calidad y mayor exactitud.
Cuando ya se incorpora el uso de flash, ya sea en la cámara o fuera de cámara, un medidor de luz o exposímetro puede ser de mucha utilidad, dándonos la posibilidad de hacer uso de nuestro tiempo más en el área creativa que en el método de ensayo y error. A qué nos referimos con esto?. Si alguna vez te haz encontrado en alguna ocasión donde quieres saber qué apertura o velocidad usar en relación a la luz de tu flash y la luz ambiental, y comienzas a hacer disparos previos ajustando a menos y a más la velocidad de disparo, luego la apertura, luego, alejas el flash de tu sujeto, o lo acercas, luego te das cuenta que la luz del flash en el sujeto es demasiado intensa y analizas tu pantalla en la cámara par determinar si hay areas “quemadas” o sobre expuestas por el flash en el rostro o vestido de tu sujeto, o haz perdido parte o la totalidad del detalle del bordado en el vestido de la novia que le costó, precisamente por éso, varios miles de dólares, entonces, es muy posible que puedas beneficiarte del uso de un medidor de luz. Sin mencionar todo el tiempo que te ahorrarás haciendo todos esos ajustes mencionados, mas los que continúan en el post-proceso cuando comienzas a nivelar los rangos tonales y te das cuenta que tu imágen carece de información y por lo tando la calidad de tu foto se ve mermada por los ajustes de tu post-procesado. Si ésto te suena un tanto familiar, vamos entonces a considerar la utilización de el medidor de luz para tus futuras sesiones de retrato en interiores, afuera, con o sin flash.
Ya que el método de medición de luz de un exposímetro de mano esta basado en la luz incidente vs. el método de medición de luz de tu cámara, que es la luz reflejada, los resultados no son otros, sino exactos. Te darás cuenta que lo único que tienes que hacer es determinar el valor máximo con el que quieres trabajar de ISO para obtener la mejor calidad de imágen, poner ese valor en tu fotómetro, luego te acercas a tu sujeto, determinas la velocidad a la que quieres tomar tu foto para lograr el efecto deseado en el fondo, seleccionas esa velocidad en el exposímetro y listo, estas a un paso de saber a ciencia cierta cual sera la apertura exacta a la cual tu sujeto estará perfectamente expuesto. Por último, posicionas la esferita blanca sobre el rostro de tu sujeto apuntando hacia la dirección de donde estarás tomando la foto (ligeramente apuntando hacia abajo para no obtener mucha luz proveniente del cielo), y finalmente, presionas el botón de tu fotómetro para saber la apertura que produjo en la pantalla. Listo. No hay márgen de equivocación. Procedes entonces a pasar esa dato a tu cámara y estás desde ya mismo, dueño de tu tiempo, sabiendo que tu imágen esta perfectamente expuesta y que ahora sólo hay que disfrutar del momento con tu pareja de novios, ayudarlos a relajarse, divertirse y tomar una sesion romántica que contará la bella historia de su día de bodas.
El ejemplo mencionado es solo para ilustrar lo sencillo que es el uso de un fotómetro/exposímetro/medidor de luz; el poco tiempo que uno emplea en ponerle información y las ventajas de sus resultados. Del mismo modo, la información que uno inserta al artefacto puede ser de ISO y Apertura, para que nos proporcione la velocidad. O la potencia a la que el flash o flashes deben disparar, ya sea usando un cable para sincronizar o con radios inalámbricos. Toma literalmente unos cuantos segundos escoger el modo de luz del que se requiere medición en el exposímetro. Ya sea ambiental, con flash y cable o con flash activado por radio.
Cabe mencionar que existen varios tipos y marcas de exposímetros en el mercado, sin embargo, para realizar las funciones más usuales, no se requiere de una gran inversión. Estos artefactos son relativamente baratos y absolutamente valen la pena por lo que se paga. Su uso es muy fácil y práctico, es muy ligero y puede colgarse en el hombro o en el cuello mientras se le tiene en uso. El manual explica funciones adicionales que requieren un poco mas de familiarización con el aparato, pero bastante sencillas de aprender.
Publicado por Cayupe
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